El Domund es el día en que, de un modo especial, la Iglesia universal reza por los misioneros y colabora con las misiones.
Se celebra en todo el mundo el penúltimo domingo de octubre, el “mes de las misiones”.
#DOMUND

“La celebración del Domund significa reafirmar cómo la oración, la reflexión y la ayuda material de sus ofrendas son oportunidades para participar activamente en la misión de Jesús en su Iglesia”.La cooperación personal es una forma de colaborar con la misión. Puedes hacerlo siendo voluntario o misionero.

Los voluntarios

Ellos aportan parte de su tiempo para acompañar, sin contraprestación financiera, el trabajo de animación y formación misionera que adelantan las Obras Misionales Pontificas.

Los misioneros

Son los que parten a los territorios de misión a entregar su tiempo y esfuerzos para servir a otros en el conocimiento de la buena noticia entre los más necesitados.El Papa cuenta con Obras Misionales Pontificias a través la colecta del Domund para sostener la presencia y labor de la Iglesia en 1127 lugares.

Los territorios de misión son aquellos donde la Iglesia es muy joven y aun no cuenta con medios propios para garantizar su existencia. Ellos representan un tercio de las diócesis de todo mundo.

Un sacerdote, en un territorio de misión, atiende a más del doble de habitantes que uno en otra región, lo que no es de extrañar poque se estima que casi la mitad de la población mundial vive en ellos. En las misiones se celebra uno de cada tres bautizos del mundo.

Más de la mitad de las escuelas de la Iglesia católica están en las misiones y aproximadamente el 26% del trabajo social de la Iglesia universal se desarrolla en los territorios de misión, donde hay 26 898 instituciones sociales (hospitales, orfanatos, residencias de ancianos…).

En nuestro país parte de lo obtenido en la campaña pro fondos del DOMUND se destina al sostenimiento de comedores sociales que, distribuidos a lo largo de todo el país, atienden en total 6 135 beneficiarios. A esto se suman otras iniciativas que se refieren a la promoción, desarrollo humano, asistencia social y evangelización de las etnias venezolanas, tales como el apoyo a niños sin hogar o desamparados en áreas de necesidad como alimentación, salud, refuerzo educativo, formación religiosa y refugio.Además de la colaboración personal y económica, hay otra forma de unirse a la misión universal de la Iglesia: la cooperación a través de la oración

Santa Teresita de Lisieux, patrona de las misiones, demostró que no hacía falta salir de un convento para ser una gran misionera. Todos los cristianos están llamados a unirse a ella, a través de la oración y el ofrecimiento de los sufrimientos de cada día por la evangelización del mundo.

La oración por las misiones tiene muchas formas: petición diaria, vigilias de oración o el rosario misionero.

Miles de monasterios de órdenes contemplativas rezan por las misiones y muchos enfermos ofrecen sus dolores y sufrimientos por la Misión, como por ejemplo los miembros de la Agrupación Misionera de Enfermos y Adultos Mayores (AMDEAM).